ELOGIO DE LA TASCA


Leonardo Boff

Me gusta ir a las tascas pues ahí puedo comer sin mala conciencia. Las hay en todo el mundo, también en las comunidades pobres, en las cuales trabajé durante años.

Debido a mi «gitanismo intelectual», hablando siempre en muchos sitios y ambientes sobre infinidad de temas que van desde la espiritualidad a la responsabilidad socioambiental y hasta sobre la posibilidad del fin de nuestra especie, los organizadores, por deferencia, suelen invitarme a un buen restaurante de la ciudad. Lógicamente, guardo la buena tradición franciscana y celebro los platos con comentarios elogiosos. Pero me queda siempre un mal sabor de boca, que impide que el comer sea una celebración. Me acuerdo de que la mayoría de las personas amigas no pueden disfrutar de estas comidas, y especialmente los millones y millones de hambrientos del mundo. Me parece que les estoy quitando la comida de la boca. ¿Cómo celebrar la generosidad de los amigos y de la Madre Tierra, si, en palabras de Gandhi, «el hambre es un insulto y la forma de violencia más asesina que existe»?

En este contexto me viene a la mente el consuelo de las tascas, o tabernas. Me gusta ir a las tascas pues ahí puedo comer sin mala conciencia. Las hay en todo el mundo, también en las comunidades pobres, en las cuales trabajé durante años. Ahí se vive una real democracia: la tasca (donde van las personas con menor poder adquisitivo) acoge a todo el mundo. Puede estar allí tomando su caña un profesor universitario al lado de un peón de la construcción, un actor de teatro en la misma mesa que un pillo, y hasta un borracho tomando su traguito. Es sólo llegar, ir sentándose y gritar: «póngame una cañita bien fría».
La tasca desempeña una función ciudadana: da a quienes la frecuentan, especialmente a los más asiduos, el sentimiento de pertenencia a la ciudad o al barrio.
La tasca brasileña es más que su visual, con azulejos de colores fuertes, el santo protector en la pared, generalmente un san Antonio con el Niño Jesús en brazos, el símbolo del equipo de futbol aficionado, y los anuncios de colores de las bebidas. La tasca es un estado de espíritu, el lugar de encuentro con los amigos y vecinos, de la conversación hasta las tantas, de la discusión sobre el último partido de futbol, los comentarios sobre la novela preferida, la crítica a los políticos y las palabrotas bien merecidas contra los corruptos. Pronto todo el mundo se hace amigo, dentro de un incipiente espíritu comunitario. Aquí nadie es rico o pobre. Es, simplemente, gente que se expresa como gente, usando el lenguaje del pueblo. Hay mucho humor, chistes y bravatas. A veces, como en el Estado de Minas, se improvisan unos cantares que alguien acompaña con la guitarra.

A nadie le importa la condición general de la barra o de las mesas. Lo importante es que el vaso esté bien limpio y sin grasa; si no, estropea la espuma cremosa de la caña que debe tener unos tres dedos. Nadie se molesta por cómo está el suelo o por el estado del baño.

Los nombres son de lo más variado, dependiendo de la región del país. Puede ser La bodega de la vieja, El bar de Sacha, La tasca de don Gomes, el Bar del Giba, La tasca del Joia, El pavo azul, La cofradía del chivo perfumado, La casa llena, o muchos otros. Belo Horizonte es la ciudad de Brasil que tiene más tascas, y celebra todos los años el concurso de la mejor comida de tasca. Los platos también son variados, elaborados generalmente a base de recetas caseras y regionales: la carne secada al sol del Nordeste, la carne de cerdo y el tutú (pasta de frijoles con harina de mandioca y bananas fritas) de Minas. Los nombres son ingeniosos: mexidoido chapado (mixto de carnes a la plancha), porconóbis de sabugosa (debe su nombre al cerdo y a las hojas de una planta llamada ora pro nobis), costilla de Adán (costillita de cerdo con mandioca), torrezno de barriga. Hay un plato que aprecio sobremanera que ofrecen en el Mercado Central de Belo Horizonte y fue premiado en uno de los concursos: bife de hígado encebollado con jiló (frutillo amargo muy popular). Si de mí dependiera, este plato debería figurar en el menú del banquete del Reino de los cielos que el Padre celestial va a ofrecer a los bienaventurados.

Bien mirado, la tasca desempeña una función ciudadana: da a quienes la frecuentan, especialmente a los más asiduos, el sentimiento de pertenencia a la ciudad o al barrio. No habiendo otros lugares de entretenimiento y de ocio, permite que las personas se encuentren, olviden su estatus social y vivan una igualdad generalmente negada en el día a día.

Para mí la tasca es una metáfora de la comensalidad soñada por Jesús, lugar donde todos pueden sentarse a la mesa, celebrar la convivencia fraterna y hacer del comer una comunión. Y en mi caso, es el lugar donde puedo comer sin mala conciencia.

Dedico este texto a mi amigo Jaguar, dibujante de comics, que aprecia las tascas.

* El autor es Teólogo de la Liberación. www.leonardoboff.com
Fuente: http://www.revistafusion.com/201111172325/Firmas/Leonardo-Boff/elogio-de-la-tasca.htm

Ilustración: Juan Davó. «La tasca». Dibujo a pluma. 1946.
En: http://www.rinconesdelatlantico.es/num6/juan_davo.html

PARA LEER, RECOMENDAR, REGALAR Y DIFUNDIR:

A propósito de la publicación de Hay Alternativas: la necesidad de rebelarse frente al dominio neoliberal

Carta abierta de los autores del libro Hay alternativas, Vicenç Navarro, Juan Torres y Alberto Garzón, a la población indignada que no acepta las políticas neoliberales que se están imponiendo a la ciudadanía, sin su aprobación y participación.

 


Escribimos el libro Hay alternativas. Propuestas para crear empleo y bienestar social en España con la intención de mostrar que, en contra de lo que dice la sabiduría convencional promovida por los establishments financieros, económicos, políticos y mediáticos del país, sí que hay alternativas a las políticas de austeridad que están haciendo tanto daño a las clases populares de nuestro y otros países.

Los representantes de los grandes intereses financieros y económicos realizan un esfuerzo constante (a través de los medios de mayor difusión de España y sus comunidades autónomas) para intentar convencer a la ciudadanía de que no hay alternativas a tales políticas de recortes sociales, buscando así dificultar e imposibilitar la presentación de otras políticas que, sin embargo, serían mucho más eficaces para mantener y expandir el bienestar de la población, y, precisamente por ello, también más democráticas y más populares que las que ellos proponen.

Su enorme poder impide que haya un auténtico debate sobre los tan temas urgentes e importantes que están hoy día sobre la mesa. Y así se puedan aplicar las medidas de reducción de derechos sociales y laborales sin apenas discusión, en aras de unos supuestos e inexistentes futuros beneficios a las clases populares y ocultando que en realidad solo proporcionan más privilegios a los promotores de tales políticas de reducción de derechos.

Este libro cuestiona cada uno de los dogmas neoliberales que alientan estas políticas y los supuestos que los sostienen y es precisamente por ello que esté teniendo tantas dificultades para darse a conocer ante el público, dificultades que aparecieron incluso antes de que se publicara.

Teníamos un acuerdo con la editorial Aguilar, una de las mayores editoriales del país, para publicar y distribuir el libro que implicaba su compromiso de sacarlo a la calle el 19 de octubre, una fecha que le permitiría ser un recurso más en los debates que deberían realizarse en el marco de las elecciones del 20-N. Para ello debimos realizar un esfuerzo hercúleo para tenerlo a tiempo y pasamos buena parte del verano trabajando en ello. Pero lo hicimos con ilusión, pues creemos que es un servicio para todas las personas –millones en España- que están indignadas por la situación actual y que buscan las alternativas que se les niegan en los foros de discusión.

El aliento y apoyo que obtuvimos en este trabajo por parte de muchos movimientos sociales, incluyendo amigos del 15-M, de los sindicatos, de los movimientos vecinales, y de todas sensibilidades políticas, eran indicadores de que íbamos por buen camino y valía la pena el esfuerzo. Y parecía que la editorial Aguilar iba a respetar su compromiso cuando comenzó su promoción activamente, no solo en su propia web sino en las principales librerías de toda España, como todavía puede comprobarse fácilmente en la red.

Sin embargo, incluso después de haber hecho algunos cambios en el texto sugeridos por la editorial y cuando la promoción estaba en marcha, hubo una orden superior que ordenó parar el proyecto. La promoción desapareció y no recibimos más que explicaciones muy opacas y ninguna seguridad de que se pudiera publicar más adelante. Ante esta situación decidimos retirar el libro de Aguilar, recomponer su diseño y difundirlo inmediatamente en formato pdf a través de internet mientras la editorial Sequitur se encargaba de publicarlo y sacarlo impreso a la calle cuanto antes.

Agradecemos este enorme esfuerzo de esta editorial y de los amigos de ATTAC que una vez más se han empeñado con generosidad en difundir el pensamiento crítico. Pero es evidente que ni Sequitur ni ATTAC tiene el potencial de distribución de las grandes casas editoriales, como Aguilar. Y es por ello que tenemos que pedir a todas las personas indignadas con el argumento de que no hay alternativas, que se movilicen y que pidan a las librerías que distribuyan el libro Hay alternativas.

Solo mediante la movilización puede la ciudadanía romper esta marginación, que alcanza dimensiones de veto político, intolerable en una democracia, por muy limitada que sea, como en el caso español.

Tenemos la convicción de que si la mayoría de la población en España pudiera conocer que sí que hay alternativas a las políticas que les están dañando, se movilizaría rompiendo con el fatalismo que le están imponiendo los medios de mayor difusión próximos a los poderes financieros y económicos que no desean que se conozcan y debatan tales políticas.

De ahí que pidamos a todas las personas con sensibilidad democrática que reclamen e insistan en que las librerías tengan disponible y visible para que la ciudadanía lo conozca y si lo desea, pueda conseguirlo. La lucha por la democracia pasa también por romper con el monopolio en la producción y distribución de ideas que solo podremos conseguir con nuestra actitud activa y nuestra rebeldía ante el intento de implantar un auténtico pensamiento único.
Ver carta en PDF: http://www.vnavarro.org/wp-content/uploads/2011/11/carta-alternativas.pdf

Artículo extraído de Vicenç Navarro – http://www.vnavarro.org/

APAGÓN CULTURAL EN CANARIAS

Acude mañana mañana miércoles 26 de octubre a las 11.00 h en el Círculo de Bellas Artes de S/C de Tenerife a la rueda de prensa.
Cada día son más impresentables los políticos de esta tierra, aquí tienen una nueva oportunidad para acabar con la cultura. Un pueblo sin cultura es un pueblo sin criterio, alienado y manipulable. No permitamos más atropellos. Hay que resistir y actuar.

Reproducimos la carta que acabamos de recibir de David Baute.

Esta mañana se nos convocó en Tenerife con carácter de urgencia a un grupo de unas 40 personas representantes del sector de la cultura en Canarias, y mañana se hará lo mismo en Gran Canaria. Está convocatoria fue realizada por el Viceconsejero de Cultura, para exponer una dura situación, que supongo ya conoceréis por la prensa

Básicamente el consejero vino a comentarnos que el próximo presupuesto del Gobierno de Canarias, tiene previsto un recorte del 65% de la partida de Cultura, o lo que es lo mismo, que pasaríamos del aproximadamente 0,8% del presupuesto que el Gobierno Canario destina a cultura, al 0,3% lo cual principalmente irá destinado a el pago de los funcionarios de cultura del Gobierno de Canarias, y a la realización de una obra en Grancanaria, ya en presupuesto.

Ante esta decisión que supondrá el final de la actividad cultural en Canarias, y la desaparición de mas de 18.000 puestos de trabajo, se creo un gabinete de crisis del sector de la Cultura Canaria, representado por unas 10 personas de diferentes sectores, de los que formo parte, ya que así me lo pidieron las productoras cinematográficas y directores de Tenerife que se encontraban presentes en esa reunión. Supongo que mañana ocurrirá lo mismo en Gran Canaria, donde también saldrá otro representante de nuestro sector.

Las urgencias de movilizaciones vienen dadas por que el cierre de los presupuestos es inminente. De todos modos el viceconsejero tiene prevista una reunión con Paulino Rivero esta semana, para presionarlo y contarle nuestro malestar, aunque no somos nada optimistas con esta reunión.

En la reunión de dicho gabinete, se habló de muchas propuestas, acciones y se tomaron las siguientes decisiones:

1. Se elaboró un manifiesto que se llevará a Las Palmas, a la reunión de mañana para que sea consensuado,

2. Se establece una rueda de prensa el próximo miércoles a las 11 de la mañana en el Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife para informar sobre este manifiesto a los medios de comunicación ( se espera que mañana fijen también la rueda de prensa en Las Palmas el mismo día a la misma hora)

3. Vamos a intentar desbordar esa rueda de prensa, con toda la gente de la cultura canaria que pueda acudir, por eso es tan importante que difundan esta convocatoria (yo no tengo los mails de todas las empresas y artistas vínculados al cine en Canarias, así que reenvíenlo). Como no da tiempo de realizar camisas se ha pedido que todos vayamos vestidos de negro.

4. Tras la rueda de prensa se realizará una reunión informativa, y se fijará la fecha, hora y lugar de una movilización a realizar en esta misma semana.

Así que difundan esta información y las que les vayan llegando lo máximo posible, y tratemos del miércoles a las 11h estar todos allí, en esta lucha estará en juego nuestro futuro profesional, y lo que es mas importante el futuro cultural de Canarias.

Un abrazo
David Baute

Crisis económica-Crisis ambiental. Las dos caras de la misma moneda

25 de octubre

Ben Magec-Ecologistas en Acción presenta un boletín de difusión masiva titulado ’Crisis Ambiental-Crisis Ecológica: las dos caras de la misma moneda’, con el que pone en evidencia las consecuencias que comporta la apuesta por la derivación de dinero público a la construcción de megainfraestructuras.

DESCÁRGATE EL BOLETÍN

Desde el punto de vista económico, destacan la derivación de una enorme bolsa de dinero público a manos de grandes empresas de la construcción, sin que este gasto suponga una inversión en la creación de puestos de trabajo, ni una redistribución de la riqueza. Estas grandes empresas, que normalmente son además las que dictan las políticas energéticas y las adjudicatarias de numerosos servicios públicos como la recogida de basura y el agua, son además las que están dirigiendo las decisiones de inversión de dinero público, que está siendo detraído de otros fines más útiles a la ciudadanía, como la sanidad, la educación, o los servicios públicos.

Desde el punto de vista ambiental, estas infraestructuras están suponiendo la pérdida de biodiversidad, el fraccionamiento del territorio, o la apuesta por un modelo energético y de movilidad muy impactante en el medio ambiente local y global.

Para colmo, muchas de ellas son obras de muy cuestionable utilidad social, que no sólo no van a suponer una mejora en la calidad de vida de la ciudadanía, sino que además, significarán una enorme carga al territorio.

Ben Magec ha elegido una selección de infraestructuras inútiles en construcción o pendientes de construir por todo el archipiélago canario, que ascienden a un total de inversión conjunta de 7.679.307.032 euros. Para que esta cifra resulte asimilable al común de la población, equiparándolos al Auditorio Adán Martín (ejemplo evidente de derroche de dinero público), se ha estimado que este dinero sería equiparable a construir 77 Auditorios Adán Martín por todo el Archipiélago.

Ejemplos flagrantes de obras públicas absurdas son la nueva terminal del aeropuerto de La Palma (230.000.000 euros), que amplía la capacidad a 3.000.000 de pasajeros para un aeródromo que en 2010 sufrió una pérdida de 14,6 millones de euros; o la ampliación del aeropuerto de La Gomera (30.000.000 euros de 1999), penúltimo en la escala de aeropuertos inútiles, con una media inferior a cinco salidas y llegadas diarias.

Los trenes de Tenerife y Gran Canaria, cuya utilidad para mejorar la movilidad es más que cuestionable, ascienden a un total conjunto de 3.894.000.000 euros.

El puerto de Granadilla (143.587.386 euros) no sólo es una obra de reconocido impacto ambiental, sino que es notoria su inutilidad, ya que será inoperativo el 60% del año. Por otra parte, el puerto de Arinaga, ejemplo más claro de infraestructura portuaria inútil, ahora quiere ser ampliado, para lo que se destinan 142.000.000 euros.

En Fuerteventura, el proyecto de Chillida sobre Tindaya, que afectará a la obra más protegida de todo el archipiélago por su enorme valor arqueológico, natural y cultural, tiene presupuestados 76.000.000 millones de euros. Pero es de destacar que además de esta cantidad, han desaparecido ya 25.000.000 euros, que jamás se han recuperado.

En todas las islas se prevé construir numerosos puertos deportivos, como el de Playa Blanca (35.000.000 euros), en Lanzarote, cuya ampliación no se justifica ni por las necesidades del municipio ni por las de la isla.

Cabe recordar, por último que todas estas inversiones tienen una dotación prevista con fondos públicos canarios de 900.000.000 euros. Todo este dinero, más el procedente de fondos estatales y europeos, es dinero público cuyo destino, insistimos, no está sujeto a ninguna predeterminación más allá de la que imponen las decisiones políticas, en muchos casos condicionadas por la presión que ejercen las grandes empresas adjudicatarias. Sin embargo, es dinero público, obtenido de las cotizaciones de todos los contribuyentes, por lo que además señalamos que el total del dinero cuantificado, también podría ser equiparable a contratar a 1.000 profesores y profesoras durante 256 años.

http://www.ecologistasenaccion.org/article21608.html

Publicación del libro de Vicenç Navarro, Juan Torres y Alberto Garzón titulado “Hay alternativas. Propuestas para crear empleo y bienestar en España”

 

«Cada vez hay menos lectores de libros y periódicos, mientras se multiplican las horas que las personas pasan delante de la televisión». Del libro «Contra los tertulianos».

Hace un par de meses, la Editorial Aguilar, mostró su interés por publicar nuestro libro HAY ALTERNATIVAS. Propuestas para crear empleo y bienestar en España, que nos prologó Noam Chomsky.

Cuando ya se había concretado como fecha de publicación el libro el 19 de octubre y se había comenzado su promoción en la web de Aguilar y en librerías, los editores nos comunicaron que la empresa deseaba retrasarla sin otra explicación de por medio, lo que nos obligó lamentablemente a desestimar su publicación en esa editorial. Se confirmaba así lo difícil que resulta difundir en España, en los momentos en que son más necesarias que nunca -como ahora en periodo pre-electoral-, ideas alternativas al pensamiento único que predomina en el debate político y social.

Para solventar esta situación hemos optado por ofrecer nuestra obra gratuitamente en formato pdf a través de la red y en una nueva edición impresa en Ediciones Sequitur que, con la colaboración de ATTAC España, se ha arriesgado a publicar rápidamente este libro que estará en librerías al precio de 10 euros a partir del 31de octubre.

Tenemos la firme convicción de que solo haciendo que la ciudadanía sepa lo que de verdad está sucediendo en nuestra economía y divulgando las alternativas que existen a esta aguda crisis del capitalismo podremos salir de ella con más empleo y bienestar social, como demostramos en este libro.

Por eso llamamos a divulgar esta versión en pdf, a estudiarla y difundir sus propuestas y pedimos a todos los lectores que se conviertan ellos y ellas mismas en distribuidores del libro una vez que se encuentre impreso.

Contra la censura de los grandes oligopolios y el pensamiento único que imponen los poderes económicos, financieros y mediáticos defendamos la pluralidad y la libertad de pensamiento conociendo y difundiendo el pensamiento crítico.

Puedes descargar el libro gratuitamente aquí o en

Web de Vicenç Navarro

Web de Alberto Garzón

Web de ATTAC España

Prólogo

por NOAM CHOMSKY

En 1978 el presidente del sindicato más poderoso de
Estados Unidos, Douglas Fraser, de la federación de los trabajadores
de la industria del automóvil United Auto Workers
(UAW) condenó a los «dirigentes de la comunidad empresarial»
por haber «escogido seguir en tal país la vía de la guerra de clases
(class war) unilateral, una guerra de clases en contra de la
clase trabajadora, de los desempleados, de los pobres, de las
minorías, de los jóvenes y de los ancianos, e incluso de los sectores
de las clases medias de nuestra sociedad». Fraser también
los condenó por haber «roto y descartado el frágil pacto no
escrito entre el mundo empresarial y el mundo del trabajo, que
había existido previamente durante el periodo de crecimiento y
progreso» en el periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial
conocido comúnmente como la «edad dorada» del capitalismo
(de Estado).
El reconocimiento de la realidad por parte de Fraser fue
acertado aunque tardío. Lo cierto es que los dirigentes empresariales
y sus asociados en otros sectores de las élites dominantes
estaban constantemente dedicados a una siempre presente
guerra de clases, que se convirtió en unilateral, sólo en una
dirección, cuando sus víctimas abandonaron tal lucha.
Mientras Fraser se lamentaba el conflicto de clases se iba recrudeciendo,
y desde entonces ha ido alcanzando unos enormes
niveles de crueldad y salvajismo en Estados Unidos que, al ser
el país más rico y poderoso del mundo y con mayor poder
hegemónico desde la Segunda Guerra Mundial, se ha convertido
en una ilustración significativa de una tendencia global.
Durante los últimos treinta años el crecimiento económico
ha continuado −aunque no al nivel de la «edad dorada»−, pero
para la gran mayoría de la población la renta disponible ha permanecido
estancada mientras que la riqueza se ha ido concentrando,
a un nivel abrumador, en una facción del 1 por ciento
de la población, la mayoría de los ejecutivos de las grandes corporaciones,
de empresas financieras y de alto riesgo, y sus asociados.
Este fenómeno se ha ido repitiendo de una manera u
otra a nivel mundial. China, por ejemplo, tiene una de las desigualdades
más acentuadas del mundo.
Se habla mucho, hoy en día, de que por el hecho de que
«Estados Unidos esté en declive» hay un cambio en las relaciones
de poder a nivel global. Esto es parcialmente cierto, aunque
no significa que otros poderes no puedan asumir el rol y la
supremacía que ahora tiene Estados Unidos.
El mundo se está convirtiendo así en un lugar más diverso
en algunos aspectos, pero más uniforme en otros. Pero en todos
ellos existe un cambio real de poder: hay un desplazamiento del
poder del pueblo trabajador de las distintas partes del mundo
hacia una enorme concentración de poder y riqueza. La literatura
económica del mundo empresarial y las consultorías a los
inversores súper ricos señalan que el sistema mundial se está
dividiendo en dos bloques: la plutocracia, un grupo muy
importante, con enormes riquezas, y el resto, en una sociedad
global en la cual el crecimiento −que en una gran parte es destructivo
y está muy desperdiciado− beneficia a una minoría de
personas extraordinariamente ricas, que dirigen el consumo de
tales recursos. Y por otra parte existen los «no ricos», la enorme
mayoría, referida en ocasiones como el «precariado» global, la
fuerza laboral que vive de manera precaria, entre la que se
incluye mil millones de personas que casi no alcanzan a sobrevivir.
Estos desarrollos no se deben a leyes de la naturaleza o a
leyes económicas o a otras fuerzas impersonales, sino al resultado
de decisiones específicas dentro de estructuras institucionales
que los favorecen. Esto continuará, a no ser que estas
decisiones y planes se reviertan mediante acción y movilizaciones
populares con compromisos dedicados a programas que
abarquen desde remedios factibles a corto plazo hasta otras
propuestas a más largo plazo que cuestionen la autoridad ilegítima
y las instituciones opresivas entre las que reside el poder.
Es importante, por lo tanto, acentuar que hay alternativas.
Las movilizaciones del 15M son una ilustración inspiradora
que muestra qué es lo que puede y debe hacerse para no continuar
la marcha que nos está llevando a un abismo, a un mundo
que debería horrorizar a todas las personas decentes, que será
incluso más opresivo que la realidad existente hoy en día.
NOAM CHOMSKY
Boston, agosto 2011

Alimentación ecológica: Agricultura y Salud. De la semilla a la boca

24 y 25 de octubre de 2011 en el Convento de Santo Domingo de Guzmán, en La Laguna, Tenerife.

En el marco del desarrollo de las acciones de formación en producción ecológica organizadas por el ICCA en este año 2011 y que forman parte de las acciones contempladas en el Plan de Actuación Bianual para el Desarrollo de la Producción Ecológica en Canarias 2011-2012, y del Convenio MARM-INTERECO para la divulgación sobre la certificación de alimentos ecológicos como garantía para los consumidores, les invitamos a participar en las Jornadas: «Alimentación ecológica: Agricultura y Salud. De la semilla a la boca» que se celebrarán durante los días 24 y 25 de octubre de 2011 en el Convento de Santo Domingo de Guzmán, en La Laguna, en la isla de Tenerife.

Con estas jornadas se pretende acercar a restauradores, consumidores y asistentes a los productos y los productores ecológicos de las islas, ofrecer herramientas para valorar la calidad de los mismos y conocer las garantías que ofrece la certificación.

Las plazas son limitadas. La inscripción en las jornadas estará abierta desde el viernes 14 hasta el viernes 21 de octubre y se hará a través de la web www.foroagroecologiaybiodiversidadencanarias.org

Las jornadas están homolagadas por la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad y por la Universidad de La Laguna (como créditos de libre elección).

¡Viva el hotel, muera el poblado!

Álvaro Santana Acuña*

El recuerdo de su trágica muerte hace casi veinte años aún perturba mi memoria. Murió en soledad y atrapado dentro de su coche tras una violenta colisión. Todavía recuerdo estremecerme al ver en la televisión los metales retorcidos del coche. Sólo después escuché su nombre: César Manrique. Era el 25 de septiembre de 1992.

Han pasado diecinueve años y Canarias sigue luchando contra los mismos demonios que César, en vida, exorcizó de Lanzarote: la especulación inmobiliaria y la degradación medioambiental. Él defendió que el turismo sostenible y el respeto por la naturaleza eran perfectamente compatibles. Sus edificios, complejos y espacios se integran respetuosamente con el entorno natural que les rodea. Tan integrados como lo están decenas de antiguos poblados costeros de Canarias.

Sin embargo hace décadas que son los hoteles y no los poblados los que se han adueñado de nuestras costas. Además, la segunda Ley de Costas, vigente desde 1988 (la primera data de 1969), ha ilegalizado muchos de estos poblados. La Ley los ha transformado, como afirma el antropólogo Fernando Estévez, en «la encarnación misma del Mal territorial».

Hoy continúan en pie hoteles y espacios de ocio privado (como varios clubes náuticos) que ocupan en parte el dominio público. Pero sólo los poblados son el auténtico cáncer que enferma nuestras costas. Como, por ejemplo, la casa terrera marinera del carpintero Santiago Medina Cáceres levantada por sus antepasados a inicios del siglo XX en la costa de Berrugo (Lanzarote). Su demolición prevista el año pasado se aplazó. Aunque Santiago, con 73 años, y su familia fueron desalojados.

Según la Ley de 1988, no menos dañinas para nuestras costas son las casas del poblado de Cho Vito. Paradójicamente están ubicadas en un municipio, el de Candelaria, que en la última década ha sufrido uno de los mayores desórdenes territoriales de España. Así que mientras en Candelaria pronto se empezarán a construir adosados y hoteles en el cielo, varios habitantes del poblado de Cho Vito viven con la amenaza del desalojo y la demolición de sus viviendas. Una amenaza postergada en septiembre de 2010.

Sin duda, no se puede generalizar. No todos los poblados costeros tienen la misma historia. De hecho, sabemos que numerosas casas de Cho Vito se construyeron tras la Ley de Costas de 1969 y por tanto son ilegales. También son ilegales hoteles ubicados no muy lejos de Cho Vito y edificados después de 1969. Pero hoy esos hoteles no están amenazados de demolición.

Aunque la Ley debe ser para todos, bajo la sombra alargada de la pala demoledora están principalmente los poblados: Bajo La Cuesta (Tenerife), La Bombilla (La Palma), Pozo Negro (Fuerteventura), Tufia (Gran Canaria)… En total, unos veintisiete mil casos en el archipiélago. Para toda España se calcula que son 400.000 los españoles afectados.

En el caso de Pozo Negro el prehistoriador Tejera Gaspar y otros especialistas han señalado que en ese lugar pudo comenzar la conquista de Canarias encabezada por el normando Jean de Béthencourt en el año 1402. También Tufia es en parte un yacimiento prehistórico.

Hoy, vecinos como Santiago Medina deben pagar las consecuencias de un absurdo legal: la aplicación retroactiva de la Ley de Costas de 1988. O sea, Santiago comete una ilegalidad por vivir en una casa terrera que su antepasado construyó junto a la costa en una época en la que no existía dicha Ley. Imagínese, es como si esta semana el Ministro de Justicia, cumpliendo una nueva ley, metiese en la cárcel a todos los descendientes de Béthencourt acusándolos del «genocidio de aborígenes» cometido por el conquistador normando en 1402. ¿Qué culpa tienen sus descendientes setecientos años después? Igualmente, ¿qué culpa tiene Santiago de que un antepasado suyo construyese una casa costera hace más de un siglo? Si no se adopta una política de caso por caso y aplicable a todos (hoteles y poblados), la imposición retroactiva de una ley constituye una verdadera injusticia.

En estos tiempos con tanto debate sobre la «memoria histórica» sorprende que las instituciones políticas no usen dicha memoria para comprender por qué muchos de estos poblados deben sobrevivir. La centenaria casa de Santiago es el vestigio de una manera de vivir en vía acelerada de extinción. Como señala el geógrafo Fernando Sabaté, muchos poblados costeros nacieron como resultado del sistema de aprovechamiento múltiple y vertical, gestionado desde la medianía y que abarcaba desde la costa hasta la cumbre. Los habitantes de cada pueblo en la medianía disponían de su propia zona de abastecimiento de comida y otros recursos en la costa y la cumbre. Así que algo de cierto habrá en la leyenda que cuenta que las papas arrugadas nacieron cuando alguien las guisó con agua de mar.

Sin embargo, en esos poblados, los expertos no ven sino casas. Y en esas casas no encuentran ni historia, ni memoria. Son simplemente construcciones de «baja calidad». No pueden (o no quieren) entender que muchas de esas casas forman parte de un complejo sistema espacial y cultural, o sea, representan un modo de vida vernáculo.

Mientras tanto, el Gobierno canario hace leña del árbol caído. Su estrategia es simple: deja actuar al Estado, alega ante la opinión pública que lo sucedido en las costas canarias es una injerencia casi colonialista de Madrid y aprovecha el malestar ciudadano para exigir al Estado la gestión total de las costas canarias.

En una economía tan dependiente del turismo, el control absoluto de nuestras costas es sin duda la guinda del pastel y… el pastel completo. Por eso el Parlamento de Canarias acaba de solicitar por unanimidad (sí, no se sorprenda, se lo repito) por unanimidad al Gobierno central el traspaso de la gestión de las costas o en su defecto que la comunidad autónoma pueda colaborar con el Estado en la gestión.

Esa colaboración se me antoja casi imposible. El Gobierno central ha recurrido el proyecto de Ley de Costas de Canarias porque invadía las competencias del Estado. Es decir, la Ley canaria intenta proteger del derribo asentamientos urbanos consolidados (como los poblados) junto al mar que el Estado prevé demoler.

¡Qué curioso! El Gobierno canario que con su Ley desea proteger los poblados costeros – enfrentándose al Estado feroz – es el mismo Gobierno que sigue obsesionado con construir el puerto de Granadilla en Tenerife. Al contrario, ya sabemos que para construirlo más rápidamente, el Gobierno inventó una Ley que descatalogaba la flora y la fauna protegidas en la zona del proyectado puerto: la tortuga boba, la seba o la piña de mar.

También, ese Gobierno que con su Ley canaria de Costas intenta proteger los poblados costeros es el mismo Gobierno que, en Lanzarote, ha dado la espalda a la Fundación César Manrique en su batalla contra la edificación de hoteles ilegales.

Gracias a la Fundación, los jueces han ilegalizado la construcción de más de 12.000 plazas alojativas, es decir, alrededor de veintisiete licencias. La semana pasada la Fundación ha vuelto a exigir a los políticos canarios el cumplimiento de las sentencias judiciales. El Gobierno canario hace mutis por el foro y el Cabildo de Lanzarote, tras encargar un único y dudoso informe, sostiene que se haga la vista gorda amparándose en una interpretación jurídicamente inviable del artículo 47 del Texto Refundido de la Leyes de Ordenación del Territorio de Canarias y Espacios Naturales de Canarias (TRLOTENC). Además el Cabildo arguye que existe un «estado de excepción urbanístico insular», en otras palabras, que hay crisis, la cual se solucionaría con la legalización de los hoteles prohibidos. El discreto Gobierno canario lo ve con buenos ojos.

He aquí entonces la razón escondida del enfrentamiento por la gestión de las costas entre el Gobierno canario y el Estado; el Gobierno canario desea implantar «la política del borrón y cuenta nueva». Con una Ley canaria de Costas y una gestión autonómica de las mismas ya no hacen falta ni moratorias ni recalificaciones. Simplemente se podría legalizar todas las viviendas construidas en las costas canarias antes de la Ley de 1988. Esta «amnistía feliz» incluiría muchos poblados costeros (legales e ilegales) y evidentemente… decenas de hoteles ilegales como los de Lanzarote.

La opinión pública no se opondrá a la amnistía. Por un lado, los poblados tradicionales costeros se salvarán de las palas demoledoras de Madrid. Por otro, se legalizarán hoteles que aliviarán la crisis, perpetuando así el monocultivo del turismo, y se vilipendiarán las voces críticas como las de la Fundación César Manrique. Ni Maquiavelo podría haberlo planeado mejor y sacar tan excelente tajada.

* Historiador y sociólogo. Universidad de Harvard

Correo: asantana@fas.harvard.edu

Una pequeña ofrenda

Una magnífica iniciativa: Se inaugura una página sobre el escritor José Jiménez Lozano:
http://www.jimenezlozano.com

Muchas gracias a quienes han hecho posible acercarnos un poco más su delicada y amorosa palabra.

Biografía, obra, textos inéditos, hemeroteca, collages, familia espiritual

Collage realizado por José Jiménes Lozano

Una pequeña ofrenda

Por lo que me dicen, en el encabezamiento de una página web que se me dedica, aparte de expresar, como va de suyo, mi agradecimiento a quienes la han hecho posible, porque al fin y al cabo se me hace un regalo o un don, debo algo así como iniciar la parleta con quienes se acerquen a esa página, y, desde luego, sé muy bien que, como escribía Simone Weil, lo más que se puede ofrecer a un ser humano es la atención. ¿Cómo no lo agradecería igualmente?

Y mi deseo, por lo demás, es que nunca pierda lo que es más exigible a quien escribe, que es que no llegue a ofrecer banalidad ni se aparte de mí el temor de ello. Y así, no es que me lance a salir al gran océano informático; estaré muy a gusto en el «Mare Nostrum», como una isla en una lagunilla, pero con el agua que Homero vio que tenía una sonrisa innumerable.

Con mi respeto y amistad

José Jiménez Lozano

 

PAN

SE quema la tostada

de pan; mas si no se quemase,

no habría tal olor a casa,

a consuelo, a paraíso.

de «Elegías menores»

 

RAÍCES

DEL árbol antiguo arrancado por el viento

nunca se vio el final de sus raíces;

eran como una esperanza grande,

y destruída.

de » La estación que gusta al cuco»

 

Dame pan y dime tonto

Vicent Boix.

Escritor, autor del libro El parque de las hamacas

Panadería. Foto: Günther Kunkel. Archivo Fedac

Durante seis días de la semana su despertador está programado a las dos de la mañana. A esa hora la mayoría estamos atrapados por los encantos de Morfeo, pero Ramón se levanta fielmente y sin rechistar. Legañoso llega al cuarto de baño donde una ducha lo acaba situando en el nuevo día que comienza. Se viste con su ropa de faena, baja por las escaleras apresuradamente y cruza la calle hasta llegar a su panadería. Allí le espera su ayudante, Manolo, que le indica que la noche veraniega está siendo poco generosa con la temperatura, y por tanto, esta madrugada se sudará la gota gorda al lado del horno.

A las seis de la mañana alguien llama a la puerta trasera que da justamente a la sala de fabricación. Ramón deja de amasar y cubierto con una capa de harina abre la puerta. Es Silvia, la encargada de una empresa de embutidos situada en una localidad colindante, que todos los días compra una barra de pan artesano para poder almorzar en el trabajo. Ella siempre repite, que pocas cosas existen como un buen bocado del pan recién hecho que paciente y concienzudamente prepara Ramón. Para Andrea, un oasis en el desierto laboral, que le permite escapar de la realidad protagonizada por el estrés, las reprimendas de su jefe Enrique y el agobio por si la nómina no se ingresa a tiempo.

Ramón lleva treinta años repitiendo la misma rutina y recibiendo alabanzas de una cada vez más mermada clientela, que degusta día tras día ese pan crujiente único e incomparable. Él se muestra feliz, sonriente y bromista, pero dentro de su ser el cansancio y la desazón se van apoderando. Muchos años cumpliendo cabalmente con un trabajo exigente que lo sumerge en un horario agotador, mientras observa impotente como los tiempos cambian y la reciente crisis económica ha torpedeado el futuro de su pequeño negocio. Muchos clientes de antaño pasan de largo a la siguiente calle, donde en un supermercado compran el pan a mitad de precio. La calidad no es comparable, pero estas personas, si hay que apretarse el cinturón, prefieren hacerlo en la comida y no en el teléfono móvil de última generación.

Respetable dice un resignado Ramón, mientras que una comprometida Silvia se despide hasta la madrugada siguiente con un escatológico “Dime qué comes y te diré quién eres”. Manolo cierra la puerta trasera pensativo y le recuerda a su jefe los nuevos ajustes laborales y sociales que anunciaron en el telediario de anoche. Los ricos más ricos y la mayoría más pobre. A este paso, él acabará sucumbiendo ante la dictadura de la banca y comprando el pan en el supermercado de la calle cercana.

Tras una pausa cargada de pesadumbre, Manolo le explica que recientemente vio un par de anuncios de dos grandes empresas que venden pan de molde, que según la propaganda pagada a los medios, están fabricados con estilos y aromas artesanos. Por primera vez en la madrugada Ramón se extraña y frunce el ceño. Piensa en los ejecutivos de esas compañías ¿Se levantarán a las dos de la mañana para cargar los sacos de harina y amasarla? ¿Sacarán el pan del horno con una pala, como hace el panadero artesano de toda la vida?

Victoriano Perera en su molino de agua. foto: Juan Franco López. Archivo Fedac

No hay respuestas y el sigilo se impone, hasta que Manolo abre otro saco de harina y rompe el triste silencio. Interroga a su jefe sobre la fórmula maravillosa propia del druida Panoramix, que permite que un pan “artesano” permanezca comestible durante días y semanas. Pero Ramón ya no hace caso. Se siente ultrajado y piensa si alguien llegará a creerse lo del pan de molde estilo “artesano”. El mercado y las grandes superficies le han quitado a muchos clientes pero ¿Podrán usurparle esa denominación propia de un duro oficio que aprendió de su difunto padre?

Amanece ya y Manolo, sin mala fe, sigue echando leña al fuego y advierte que algo similar está pasando con la horchata. Una empresa que la elabora industrialmente la denominó este verano como “maestro horchatero”. Es más, en su anuncio televisivo, hizo pasar su líquido embotellado como horchata artesana.

Al escuchar esto a Ramón le vienen al recuerdo dos anuncios más, en donde una empresa cervecera y otra de comida rápida, aprovechando el periodo estival, presumieron de vender sus productos en varios países. Piensa en los negocios y artesanos locales que sucumbieron ante la globalización alimentaria, a la vez que le parece contradictorio que se recurra a la diversidad lingüística y cultural para promocionar la uniformidad gastronómica. Asevera mosqueado en lo aburrido que sería dar la vuelta al mundo y encontrarse, en cada ciudad, siempre con el mismo museo, las mismas catedrales y a la gente hablando una misma lengua.

Manolo ya nota demasiada solemnidad y las palabras de su jefe se oyen ligeramente entrecortadas. Espera tranquilamente y cuando las aguas parecen volver a su cauce pronostica en voz alta que el Madrid de Florentino, este año, tampoco ganará nada. Pero de poco sirve cambiar de tema porque Ramón está en su mundo, del que sólo sale a las ocho y media, cuando llega su mujer a abrir su negocio, o lo que es lo mismo, una panadería artesana de las de verdad.